1/7/2025
Reconectar con la Creación: Guía práctica para encontrar la plenitud en la naturaleza
por Rev. Erin Dunigan

La reverenda Dra. Jenny Hale, pastora asociada en Oregón y apasionada de la vida al aire libre, se ha embarcado en una misión para ayudar a la gente a redescubrir los profundos beneficios de pasar tiempo al aire libre.
Impulsada por la preocupación por el bienestar de su comunidad y la creciente desconexión con la naturaleza en el mundo moderno, su exploración la llevó al poder transformador de conectar con la creación. Trabaja como pastora asociada en la Valley Community Presbyterian Church de Portland, Oregón.
No se trata sólo de disfrutar de vistas panorámicas, sino de redescubrir cómo fuimos diseñados para prosperar en conexión con el mundo natural. Estudia en Seminario de Portland en la Universidad George Foxy su proyecto de doctorado, "Movimiento en la naturaleza: Un modelo experiencial al aire libre", profundiza en la ciencia, las escrituras y las experiencias personales que iluminan el profundo impacto de pasar tiempo al aire libre. No se trata de un mero ejercicio académico, sino de una guía práctica diseñada para que las congregaciones y los individuos integren la conexión con la naturaleza en su vida cotidiana.
Un llamamiento a la reorientación
El trabajo de Hale surge de una pregunta fundamental que empezó a plantearse: ¿Estamos viviendo de acuerdo con la forma en que nuestros cuerpos y espíritus están diseñados para prosperar?
"Me he pasado la última década preguntándome si nosotros, como seres humanos, especialmente los del mundo occidental, vivimos de acuerdo con el diseño del creador de forma que nos ayude a estar sanos", dijo Hale.
Veía a tanta gente en su comunidad -sus amigos, sus colegas y ella misma- enferma física, emocional o socialmente con dificultades. "Empecé a preguntarme si nos habíamos desviado de la forma en que fuimos diseñados", afirma. Esto, unido a las pruebas científicas sobre los beneficios de la exposición a la naturaleza, alimentó su deseo de explorar una solución enraizada en la propia creación.
Los estudios han demostrado que la naturaleza tiene un profundo impacto en nuestro bienestar. Desde el efecto calmante del canto de los pájaros sobre la ansiedad hasta las propiedades hipotensoras del agua corriente, el mundo natural ofrece un potente antídoto contra el estrés de la vida moderna. Además, estar al aire libre refuerza nuestras conexiones sociales, fomentando un sentimiento de comunidad y pertenencia. "Lo hemos sabido intuitivamente cuando estamos en la naturaleza, pero ahora la ciencia lo está demostrando", afirma.
Entre la ciencia, las escrituras y la experiencia
Pero el proyecto de Hale no se limita a enumerar los beneficios de la naturaleza para la salud. También profundiza en los fundamentos teológicos de esta reconexión. Explora la historia de la visión de la naturaleza por parte de la Iglesia occidental y rastrea la tendencia a dar prioridad a la tecnología y la industria frente a una relación armoniosa con el mundo natural. "Hay una conexión interior que es real y para la que estamos diseñados", afirma. "Cuando vivimos en eso podemos estar más sanos y podemos profundizar en nuestra relación con Dios".
Al examinar las Escrituras junto con la investigación científica, Hale pretende ayudar a las personas a redescubrir su identidad en la creación de Dios. La naturaleza, argumenta, ofrece un santuario para la reflexión tranquila, un espacio donde podemos conectar con lo divino sin las presiones de la vida cotidiana.
Herramientas prácticas para la transformación cotidiana
Se apresura a señalar que este enfoque no aboga por elaborados retiros o cambios drásticos en el estilo de vida. Quería crear algo que las personas o las congregaciones pudieran utilizar en su vida cotidiana en el mundo. "Quería crear algo que la gente pudiera utilizar para mantener su propia conversación con Dios conectando con la naturaleza", afirma.
Así que creó herramientas cotidianas que se centran en integrar la conexión con la naturaleza en nuestros ritmos diarios. Las herramientas básicas son:
- Un calendario de pared mensual con textos bíblicos, conocimientos científicos sobre los beneficios de la naturaleza e ideas para reflexionar.
- Un diario de la naturaleza con sugerencias y espacio para plasmar experiencias y reflexiones personales.
- Recordatorios tangibles, como pequeñas piedras u hojas, que sirvan de estímulo constante para establecer una conexión consciente con el mundo natural.
A Universal Anhelo
"Aunque la gente no tenga fe en Dios", dice Hale, "puede beneficiarse".
La atracción por el aire libre es una experiencia humana primitiva. "Hay algo en nuestro cableado que sabemos, pero que no siempre podemos expresar con palabras", afirma.
Ya sea un paseo por el parque o simplemente observar una planta de interior, incluso pequeñas dosis de naturaleza pueden tener un profundo impacto. "La gente no siempre quiere venir a la iglesia un domingo y sentarse en un banco para conectar con Dios", dice. "Pero dirán: 'Si vas de excursión, iré contigo'".
De cara al futuro
A Pratt le apasiona compartir su programa con el mundo. "¿Dónde puede utilizarse? ¿Dónde se necesita? Ha sido un trabajo muy duro, quiero compartirlo", afirma. Además, está colaborando con otros colegas para organizar un taller el próximo otoño, en el que expondrán sus proyectos relacionados con la reducción de la ansiedad, la importancia del juego en el liderazgo y el fomento del bienestar del equipo.
La historia de Pratt es un poderoso recordatorio de que, incluso en medio de la ansiedad, el estrés y el ajetreo de nuestro mundo moderno, existen oportunidades para conectar y redescubrir la plenitud que Dios quiso para nosotros. Al salir y volver a conectar con la creación, no sólo podemos mejorar nuestro bienestar, sino también profundizar en nuestra relación con nosotros mismos, con los demás y con la Divinidad.